Título: Opal.
Autor: Jennifer L. Armentrout.
Páginas: 424.
Saga: Lux #3.
Género: Romántico fantástica.
Edición: Tapa Blanda.
SINOPSIS
No hay nadie como Daemon Black.
Cuando se propuso demostrarme sus
sentimientos, no bromeaba. Nunca volveré a dudar de él. Y ahora que hemos
superado tantas dificultades, saltan chispas cada vez que estamos cerca. Pero
ni siquiera él puede proteger a su familia del peligro que supone intentar
liberar a los inocentes.
Después de todo lo que ha pasado, ya no
soy la misma Katy. He cambiado… y no estoy segura de las consecuencias de este
cambio. Con cada paso que damos para desvelar la verdad nos acercamos más a la
organización secreta responsable de torturar y someter a experimentos a los
híbridos, y me doy cuenta de que mis habilidades son mucho mayores de lo que
imaginada.
Recibimos ayuda de quien menos
esperábamos y los amigos se convierten en enemigos. Pero jamás nos rendiremos.
Aunque esto implique que nuestro mundo acabe hecho añicos para siempre. Juntos
somos más fuertes. Y lo saben.
OPINIÓN
ADVERTENCIA:
No leer esta reseña si aún no has leído
los dos libros anteriores, así te cuido de spoilers. Gracias Ternuras.
Sí, estoy de nuevo, con una reseña de
esta saga, en la que Daemon Black me está robando más que suspiros. ¿Recuerdan
a aquel Daemon terriblemente pesado con Katy, humillante y egocéntrico? Bueno, lo sigue siendo, pero ya no más con
Katy. Digamos que ahora se enfoca en ser un todo protector con ella, y demostrarle
sus sentimientos hacia ella.
Cuando leí que Daemon se proponía a
demostrarle sus sentimientos a Katy, también flipe como ella. No sabía que
esperar de Daemon, o que podía significar para él “demostrar sus sentimientos”.
Me temía que fuese un payaso y terminará de hundir a Katy más de lo que ya
estaba por los sucesos que han pasado desde que tiene poderes, como las muerte
de Adam, la pelea con De y demás. Si me seguís en esta lectura, sabréis de qué
os hablo. Pero no, realmente con este libro me he quedado inmensamente
sorprendida con el giro de Daemon hacia Katy, cada detalle ha sido, sin
palabras. Claramente nunca pierde su esencia de juguetón, pero aun así, a veces
tiene sus momentos de ternura.
Dejando a un lado a Daemon (que podría
hablar de él en toda la reseña) en la tercera parte de la saga Lux, aparte de
encontrarnos con un Daemon y una Katy cambiada, también no podemos olvidar el
hecho de que el hermano trillizo de Daemon, Dawson, ha vuelto con ellos después
de sospechas, búsqueda y tratos. (Si no has leído los anteriores posiblemente
esto haya sido un spoiler.)
Claramente la tortura que Dawson a
recibido por el Departamento de Defensa lo ha cambiado, y en lo único que se
enfoca ahora, no es en su familia, sino en Beth, su novia, la que al igual que
Katy, fue curada por Dawson y eso la muto, llevándola a manos equivocadas.
Ahora Daemon, Katy y los demás están de acuerdo en ayudar a recuperar a Beth,
ya que solo así, Dawson puede volver a ser él, y no un zombie andante. Pero hay
un pequeño detalle, Blake (Una rata vil), uno de los enemigos pasados de
Daemon y Katy, vuelve. Y vuelve con una propuesta, más acertada a amenazada,
con la que pueden recuperar a Beth, ayudándolo a recuperar a su amigo Cris también. Es
allí cuando la familia Luxen y Katy tienen que decidir si están dispuestos a
poder confiar en alguien que los ha traicionado. Terminan aceptando por la desesperación
de poder acabar ya de una vez por todas la búsqueda de Beth, y tener a Dawson
tranquilo, pero Daemon y Katy saben, que de Blake… no se deben confiar. En pocas
palabras esta tercera entrega se enfoca un poco más en los personajes
secundarios.
Lo que me impactó, me dejo con la boca
abierta, me golpeó y me dejo con ganas de más, fue el final. Por Dios, leer ese
Daemon desgarrado, me partió el corazón. Sin duda que el final es un gran
Clifhanger. Un final muy bien pensado de la autora para seguirnos enganchando
con su prosa. Creedme estoy con los pelos de punta por terminar mi lectura
actual y continuar con el siguiente libro de esta saga. No sé si podré esperar
más, pero seré fuerte.
Si sois de los que ha seguido la carrera
de lectura de esta saga, os mando un abrazo psicológico de verdad. Que podamos
superar el final y podamos seguir con la aventura de Daemon y Katy. Os animo a
que sigáis por el camino con los Luxen en esta Saga que cada vez más me
impresiona.
“Abrumada por lo que acababa de admitir, no supe que
decir. Pero entonces Daemon inclinó la cabeza y me besó, y descubrí que a
veces, cuando alguien dice algo tan absolutamente perfecto, no es necesario
responder. Sus palabras lo habían transmitido todo.”
5/5
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